miércoles, 27 de abril de 2011

Cuidad vuestros sentidos

TENEMOS QUE CUIDAR NUESTROS SENTIDOS

Los órganos de los sentidos son partes del cuerpo que se pueden deteriorar. Por eso hay que tener mucho cuidado con ellos.

Además, muchas personas no tienen la suerte de nacer con todos los sentidos desarrollados. Muchas personas no pueden ver, son ciegas; o no pueden oír, son sordas.

Personas con problemas en la vista

Las personas que nacen sin el sentido de la vista, o que de mayor lo pierden, no pueden percibir el mundo que les rodea por sus ojos, pero sin embargo, tienen el resto de órganos de los sentidos más desarrollados, para poder recibir la información. 

Gracias al oído, escuchan todo lo que les rodea, como por ejemplo, si van a cruzar la calle, escuchan a los coches, y ¿os habéis fijado que cuando un semáforo se pone en verde para los peatones, suena como un pajarito? Pues es para avisar a las personas ciegas que ya no pasan coches y pueden cruzar. 


Para pasear, las personas ciegas se apoyan en unos bastones especiales, que les ayudan a detectar los escalones, los bordillos de las aceras, los obstáculos...


También es frecuente ver a personas ciegas acompañadas por perros guía. Los perros guía son animales entrenados para ayudar a la persona ciega a sortear los obstáculos, además de hacerles compañía como mascota.


¿Sabéis cómo leen las personas ciegas? ¡Con los dedos! Si, si, hay un sistema de lectura que es el alfabeto Braille. En este alfabeto, cada letra es sustituida por una serie de puntitos en relieve, que las personas ciegas aprenden a identificar con los dedos cuando pasan la mano por encima de ellos.

Personas con problemas auditivos

Las personas que nacen sin el sentido del oído, o que lo pierden al hacerse mayores, no pueden percibir los sonidos del mundo que les rodea. Deben guiarse por sus otros sentidos, sobre todo por la vista.

Las personas sordas tienen un lenguaje especial: el lenguaje de signos. Utilizan las manos para comunicarse, pero ¡ojo! eso no significa que las personas sordas no puedan hablar. La mayoría puede, sólo que como no pueden oírnos cuando hablamos con ellos, tenemos que convertir las palabras en gestos especiales.

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